La empresa global dedicada a la producción de conservas de pescado, Nauterra, concluyó el año 2024 con un balance financiero favorable y logros destacados en su enfoque ecológico. Durante su primer año operando con su nueva identidad empresarial, después de abandonar su antiguo nombre reconocido, la compañía ha fortalecido su presencia estratégica en todo el mundo y ha cimentado su compromiso con la sostenibilidad como uno de los fundamentos de su modelo de negocio.
Uno de los hitos más relevantes del año fue la puesta en marcha de su primera planta fotovoltaica de autoconsumo en la localidad gallega de Carballo. Esta instalación, desarrollada en colaboración con una compañía energética especializada, permitirá a la empresa reducir significativamente su huella de carbono al evitar la emisión de más de 200 toneladas de dióxido de carbono al año. Esta iniciativa forma parte del plan corporativo de sostenibilidad climática que marca una hoja de ruta clara hacia una producción más limpia y eficiente. Además, se prevé la instalación de un segundo sistema similar en El Salvador, en la planta de La Unión, durante el año 2025, lo que subraya el carácter internacional del compromiso medioambiental de la firma.
El refuerzo de la estructura interna ha sido fundamental en esta fase de cambio. La inauguración de nuevas oficinas en A Coruña y el nombramiento de Enrique Orge como director general constituyen un avance significativo en el desarrollo de la empresa. Orge, quien desde 2020 ha estado al mando de la División Europa, tiene ahora la tarea de guiar el crecimiento equilibrado a nivel mundial, integrando un enfoque de innovación, eficiencia y conciencia ambiental.
Desde una perspectiva económica, en 2024 la compañía logró una facturación de 727 millones de euros, representando un aumento del 4,4% en comparación con el año previo. El EBITDA fue de 63,9 millones de euros, con un incremento del 14,9%, lo que se atribuye a la solidificación de una estrategia de crecimiento centrada en la innovación, la apertura a nuevos mercados y el esfuerzo conjunto de sus equipos.
En términos de volumen, Nauterra comercializó más de 105.000 toneladas de producto terminado, lo que representa un incremento del 5% en comparación con 2023. Su flota, compuesta por seis atuneros, dos buques de apoyo y un barco frigorífico, continúa garantizando operaciones eficientes y sostenibles. Brasil sigue siendo el principal mercado, seguido de cerca por España, Italia, países de Centroamérica y Argentina.
Con respecto a sus marcas, sobresalen progresos importantes. La firma más famosa ha conseguido un incremento considerable en participación de mercado tanto en términos de valor como de cantidad, respaldada por campañas promocionales creativas que han captado la atención de nuevos tipos de consumidores. A lo largo del año, se añadieron más de 700.000 hogares nuevos a su cartera de clientes, y se presentaron productos como las Ensaladas Foodie y Calvo +PRO, que satisfacen la creciente demanda de alternativas alimenticias más saludables y funcionales.
Otras marcas del grupo también han reforzado su presencia en mercados clave. En Brasil y Argentina, se ha consolidado el liderazgo en las categorías de sardinas y atún, mientras que en Italia se mantiene una sólida posición como segunda marca de referencia, fortaleciendo su presencia en el competitivo mercado europeo.
El balance del año refleja una clara alineación entre sostenibilidad, innovación y crecimiento. La compañía reafirma su compromiso con modelos productivos más respetuosos con el entorno, centrando sus esfuerzos en tres ejes estratégicos: la transición energética, la eficiencia operativa y la cercanía al consumidor. Con esta visión integral, la empresa se posiciona como un actor relevante en el impulso hacia una alimentación más sostenible y responsable a escala global.
